- ¿Qué importa tu opinión? Escribo por no suicidarme.
- Por no ir al siquiatra, dijo él.
- Los siquiatras no me sirven, ellos sólo anestesian verdades. Exhumo los recovecos de mi mente.
- ¿Alucinaciones incluidas?
- No las tengo.
- Los cuentos no están mal, siguió él. Son basura desechable. Carecen de forma, de estilo, de sustancia. Cualquier historia erótica de desahogo explícito sería mejor.
- Son la historia de mi vida, añadí exhalando humo.
- Por eso digo, carcajeó. No están mal. Son casi buenos.
- Jódete si no te gustan.
- Jódeme.
- ¡Vale!
12.8.07
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1 comentario:
Deleite y aversión... eso mismo es.
Fascinante.
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